La inteligencia artificial (IA) causó revuelo en el mundo, con nuevas herramientas impulsadas por la IA, como ChatGPT, que abren nuevas oportunidades en la educación superior para la creación de contenido, la comunicación y el aprendizaje, al tiempo que plantean nuevas preocupaciones sobre los abusos y la sobrecarga de la tecnología.
La IA revolucionó la forma en que el mundo funciona, desde la comunicación hasta el transporte y la atención médica. En el campo de la educación, está teniendo un impacto significativo, cambiando la forma en que los estudiantes aprenden y cómo los educadores enseñan.
Enseñanza personalizada
Esta tendencia se refiere a la idea de que los alumnos deben tener un mayor control sobre cómo aprenden y qué aprenden. Los avances tecnológicos permiten que se adapte el contenido y las experiencias a las necesidades y preferencias individuales de los mismos.
Esto no solo implica adaptar los programas, sino también cómo se evalúa. La IA es una herramienta que ayuda a los educadores a evaluar el progreso estudiantil en tiempo real y de esta manera, proporcionar retroalimentación inmediata y adaptada a su ritmo.
Tutoría inteligente
A través de chatbots y asistentes virtuales, los alumnos hacen preguntas y obtienen respuestas instantáneas, lo que les ayuda a avanzar en su formación y a superar cualquier obstáculo que encuentren. Además, la tutoría inteligente también ofrece sugerencias para proporcionar recomendaciones de recursos adicionales.
Analíticas
Es otra tendencia en auge. Se refiere a la capacidad de recopilar y analizar datos a fin de ayudar a los educadores a comprender mejor el progreso del estudiante y a identificar áreas en las que necesitan ayuda adicional.
Una forma de contribuir al desarrollo formativo es mediante la gamificación. La misma se refiere al uso de elementos de juego para motivar a los alumnos y aumentar su compromiso con el material. La realidad aumentada, por otro lado, porque facilita la interacción con contenido digital en el mundo real, lo que hace más interesante.
En conclusión, la tecnología está transformando la educación de diversas maneras, desde la personalización del aprendizaje hasta la modalidad en línea e híbrida, la inteligencia artificial, la analítica y la gamificación. Los docentes deben estar al tanto de estas tendencias y utilizarlas para mejorar de manera integral el proceso formativo.