En cualquier sistema, es esencial familiarizarnos con la terminología adecuada para hablar de evaluación. Aunque palabras como examen o prueba son comunes, existen otros términos importantes que debemos conocer para un análisis completo y efectivo.
-Nivel de adquisición: este término se refiere al nivel cualitativo en el que se encuentra una persona durante su proceso de formación. En términos sencillos, mide qué tan bien está aprendiendo. Un ejemplo claro de esto es el Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas (MCERL), que clasifica el aprendizaje en niveles A, B y C, cada uno con subniveles 1 y 2. Saber el nivel de adquisición permite a los estudiantes entender en qué punto se encuentran y cuánto les falta por avanzar.
-Métrica: se refiere a los resultados obtenidos que pueden compararse con otros similares. Por ejemplo, en el ámbito de la lectura, una métrica incluye el número de palabras leídas por minuto y el número de errores cometidos, lo cual proporciona un nivel de eficacia lectora. La métrica permite establecer comparaciones y seguir el progreso de los estudiantes en relación con estándares establecidos.
-Sistema de recolección de datos: hace alusión a los métodos utilizados para recoger evidencias concretas. Esta recolección es manual o automatizada mediante herramientas o plataformas digitales. Por ejemplo, una plataforma de lectura mide el tiempo de lectura y el número de errores, generando así una métrica de eficacia lectora. La recolección de información es fundamental para realizar un análisis detallado y obtener data precisa sobre el rendimiento.
-Análisis: permite interpretar los datos recolectados y compararlos con las métricas establecidas. Suele ser manual o automatizado y permite al docente identificar patrones, inconsistencias y áreas de mejora. Por ejemplo, al analizar los datos de lectura, se observa la evolución de los estudiantes repetidores y la relación entre el número de palabras leídas por minuto y la comprensión lectora. Esto proporciona información para realizar ajustes y mejorar los resultados.
-Actuaciones derivadas del análisis: son las acciones que se toman con base en los resultados del análisis. Estas actuaciones incluyen cambios en el sistema de enseñanza, ajustes en las actividades y modificaciones en los hábitos de estudio. El objetivo es asegurar que los alumnos alcancen sus objetivos.
El papel del docente o formador
El docente tiene un rol fundamental en la evaluación, ya que recopila datos, utiliza métricas y toma decisiones basadas en ellos. Es importante reconocer que no existe un proceso evaluativo completamente objetivo, ya que factores como el contexto social, las experiencias personales y el estado emocional de los estudiantes influyen en los resultados. Por tanto, el docente debe ser consciente de estas influencias y utilizarlas a su favor.
La importancia de los datos en la medición
La analítica, o learning analytics, es el uso de datos para evaluar y perfeccionar la formación. Involucra tanto big data, que permite analizar grandes volúmenes de información comparativa, como small data, que se refiere a los datos específicos de un grupo reducido de aprendices. Ambos son valiosos y complementarios. Mientras que el big data proporciona tendencias y patrones a gran escala, el small data permite una interacción más personalizada y detallada con los estudiantes.
Comenzando al revés: el aprendizaje desde la evaluación
Una estrategia innovadora es diseñar el proceso de enseñanza comenzando por la evaluación. Esto implica establecer primero los criterios de prueba y luego diseñar los contenidos y actividades en función de estos criterios. Por ejemplo, si la finalidad es interpretar y expresar el valor de números en diversos contextos, las actividades incluyen la creación de facturas, el análisis de consumos y la resolución de problemas matemáticos. Este enfoque asegura que los objetivos estén claramente definidos desde el inicio y que las actividades estén alineadas con los criterios.
