“El gran desafío de la universidad… estriba en la urgente necesidad de planificar, diseñar, desarrollar e implementar competencias digitales a fin de formar mejores profesionales capaces de entender y desarrollar el entorno tecnológico en función a sus necesidades, así como implementar la universalización de un lenguaje digital sustentado en programas desarrollados bajo formatos de Inteligencia Artificial”, manifiestan Ocaña, Valenzuela y Garro.
La evolución tecnológica, especialmente en el campo de la Inteligencia Artificial (IA), plantea desafíos significativos para las universidades en su misión de formar profesionales competentes y adaptados a las demandas de la modalidad digital actual.
Transformación Tecnológica
La IA representa una revolución en la automatización y optimización de procesos complejos. Es importante prepararse para el impacto creciente de esta tecnología.
Aunque el uso de la IA en la educación puede suscitar preocupaciones, es esencial abordar estas inquietudes mediante un diálogo abierto y constructivo. Su implementación requiere una reflexión profunda sobre sus implicaciones éticas, sociales y pedagógicas. Los docentes deben adaptarse y actualizarse para optimizar su enseñanza y aprovechar al máximo las herramientas digitales.
El Rol de las Universidades
Es importante que las instituciones académicas lideren discusiones informadas sobre la IA y su impacto en la sociedad. Esto implica no solo comprender la tecnología, sino también adaptar estratégicamente sus metodologías y estructuras para abrazar el cambio. Se trata de convertirse en un agente activo en la generación y aplicación de nuevo conocimiento para impulsar la innovación y el progreso social.
Los temores relacionados con la IA, como el reemplazo humano y las preocupaciones éticas, deben ser abordados promoviendo el uso ético de la IA y fomentando la conciencia sobre la importancia de la privacidad y la equidad en su aplicación.
Para adaptarse a este cambio tecnológico, los docentes pueden adoptar estrategias proactivas. Esto incluye una inversión significativa en desarrollo profesional, infraestructura tecnológica y alianzas interdisciplinarias. Además, es crucial diversificar las fuentes de ingresos y establecer colaboraciones estratégicas con organismos tecnológicos para garantizar una transición exitosa hacia una modalidad virtual.
La implementación de competencias digitales no solo es una necesidad, sino una oportunidad para redefinir la educación superior en beneficio de la sociedad y el progreso continuo.
Además de los desafíos inherentes a la integración de la Inteligencia Artificial en la educación superior, es esencial reconocer cómo los avances tecnológicos están transformando la producción y distribución de contenidos en general. En un entorno digital cada vez más dominado por plataformas y algoritmos, las instituciones académicas también enfrentan la tarea crucial de mantener su relevancia y sostenibilidad al adaptarse a estos nuevos paradigmas. Al igual que en el ámbito periodístico, donde la preocupación por la distribución y la monetización de contenidos de calidad es evidente, las universidades deben considerar estrategias innovadoras para asegurar la accesibilidad y la valoración del conocimiento generado, en línea con los principios éticos y las necesidades emergentes de la sociedad digital.
FUENTE:
Vásquez Rizo, F. E. y Jiménez Correa, C. (2022). reflexiones académicas sobre la profesión en tiempos de IA:.