fbpx

Persuadir a los demás

Share This Post

Share on facebook
Share on linkedin
Share on twitter
Share on email

La persuasión tiene que ver con nuestra forma de hablar y la manera en la que nos presentamos.

Persuadir a otros, significa hacer que los demás cambien su opinión. 

Factores más importantes de la persuasión 

La simpatía

¿Con quién es más probable que te pongas de acuerdo? ¿Con alguien que te cae bien o que te cae mal? Probablemente, lo que más hace conectar con una persona, es tener intereses y aficiones en común. 

A un compañero o una compañera, simplemente le puedes preguntar, ¿cuáles son tus hobbies? ¿qué haces en tu tiempo libre? O, hablando con un cliente, quizás te das cuenta que le gusta cierto equipo de fútbol o algún tipo de música. Entonces, muestra interés. 

Puedes invertir un poco de tiempo e investigar por Internet, mirar el perfil de LinkedIn de tu cliente, y, por ejemplo, informarte sobre cuándo juega su equipo favorito o si ganó o no. Así, en la próxima conversación, se te hará más fácil romper el hielo. 

Trata de aceptar a los otros tal y como son. No juzgar. 

La credibilidad

Los argumentos lógicos son muy importantes para persuadir, pero cuanto menos sabe la otra persona sobre el tema más importante se hace tu credibilidad. Te ayuda para que los demás te escuchen y te tomen en serio. Así que, lo que hace falta es mostrarles que somos fiables, profesionales y que sabemos de qué hablamos. 

Hay varias maneras para aumentarla. Una, es sobre mantener una actitud abierta. Con eso quiero decir que tus argumentos deben incluir varios puntos de vista, viendo ventajas y desventajas de cada uno. Si rechazas un punto de vista parece que te faltan argumentos o que, realmente, no dominas tu campo. Con una actitud abierta demuestras que ves las ventajas.

Lo importante es que se note que tienes la mente abierta para diferentes ideas y que tu opinión es el resultado de una investigación de varios factores. 

Otro punto importante es que demuestres que tus intenciones son buenas, que no tienes ningún interés en crear problemas, al revés, estás pensando en los beneficios para la empresa, tu equipo o tu cliente.

Encontrar soluciones

¿Qué hacer si dejamos una mala primera impresión? Las primeras impresiones se pueden cambiar. Para mostrar que eres profesional y buena persona tienes que pasar tiempo con la persona a la que ofendiste.

Una vez que alguien haya llegado a tener una primera impresión y opinión de ti, no la cambiará fácilmente. Si, por ejemplo, tuviste unos días malos y cometiste muchos errores puedes hacer ahora todo correctamente, pero en el momento en el que cometas otro error, la otra persona se acordará de los días que cometiste tantos fallos. 

Para hacer que la otra persona cambie de opinión, tienes que sorprenderla. Consigue que esa persona se dé cuenta del buen trabajo que estás haciendo.

Prepara tu elevator pitch

Así se llama este discurso de menos de un minuto diseñado para presentarse a uno mismo, su trabajo, su idea y captar el interés del otro. No solo sirve para ganar clientes para tu empresa sino también para presentar ideas para proyectos o presentarte a ti personalmente. 

Ejemplo: 

“Buenos días, soy Rosa López, experta de ventas en “nombre de empresa”. Diseñamos y construimos robots para evitar posibles problemas de salud de trabajadores de almacenes. Nuestros robots no solo pueden adaptarse a cualquier tipo de sistema de logística, sino que también se pueden ajustar a la altura de los trabajadores y así evitar que tengan que hacer movimientos dañinos levantando mucho peso, por ejemplo. Me gustaría tener la oportunidad de contarle más sobre nuestras soluciones esta semana o la siguiente. ¿Qué le parece?”

Habla con influencia

Hay gente que no solamente tiene un mensaje, sino que también lo relata de una manera que tiene impacto.

¿Cómo puedes crear una conexión personal? ¿Cómo transmites tu mensaje? ¿Cómo usas tu voz? Tener una conexión personal con el tema aumenta mucho tu credibilidad y captura el interés de todos.

Hay una cita muy famosa del escritor Simon Sinek «La gente no compra lo que haces, compra el por qué lo haces». Todo el mundo tiene un por qué. Cuenta tu historia y dales la oportunidad de entender tu motivación, al final, esto será lo que les impactará. Para hablar con influencia, primero es importante tener claro cuál es el mensaje que quieres transmitir. 

Piensa también en tu lenguaje corporal, demuestra que sabes de qué hablas, todo esto requiere que te tomes tiempo para prepararte y con buena preparación te sentirás capaz y serás más persuasivo.

Fuente: Romina Daghighi – Coach y formadora

More To Explore